En un ejercicio de observación y constante revisión, las autoras identifican como problemática en la zona rural “El frutillo” (Boyacá), el bajo nivel de argumentación, interpretación, comprensión y pensamiento crítico de los niños y niñas, situación que desencadenó la posibilidad de construir una propuesta pedagógica que remplazara la formación tradicional en marcada en la repetición y la memoria, por una estrategia educativa que le diera importancia a aprender a partir del reconocimiento del contexto y la interacción con él. Es por esto que, basados en la propuesta de Paulo Freire, lasinvestigadoras implementan talleres vivenciales que evidencian la evolución de los estudiantes con respecto a la argumentación oral, las posturas críticas, la resolución de problemáticas, eldialogo argumentativo y la capacidad para justificar y sustentar sus planteamientos.
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